Sendero circular PR-BU-187 . Sendero del Cueto en Castrojeriz de 13,4 km.
En tiempos Castrojeriz y su castro antiguo, situado en la falda de la montaña, albergaba monumentales iglesias, conventos, hospitales, hospederías, mesones e importantes comercios en los que se expendían abundantes viandas traídas de ultramar, convirtiendo en uno de los más importantes del Camino de Santiago. Siendo origen de importantes familias de comerciantes con otras ciudades europeas.
Hoy en día aún conserva vestigios de su glorioso pasado, como las casas blasonadas del Cordón o de los Gutiérrez-Varona, restos del convento y hospital de San Antón, la Colegiata de Santa María del Manzano, la iglesia parroquial de Santo Domingo, la iglesia-fortaleza de San Juan Bautista o el monasterio de Santa Clara, fundado por Alfonso X el Sabio.
Distancia: 13,4 km
Tiempo estimado: 3 horas
Desnivel acumulado: 230 metros
Dificultad: Media
Época recomendada: Todo el año
Itinerario
El sendero abandona la localidad de Castrojeriz en dirección al cementerio. Llega a un cruce con varias posibilidades, por lo que hay que estar atento a la señalización, debiéndose tomar el segundo camino que se observa por la derecha. Desde aquí, el itinerario, continua por un amplio camino de concentración parcelaria que deja a su izquierda un vallado de piedra y que avanza paralelo, aunque a cierta distancia, a la carretera que une Castrojeriz con Hinestrosa. Las tierras de cultivo acompañan al senderista en este tramo.
La monotomía del camino se ve alterada por una señal que indica un giro de noventa grados hacia la izquierda y que guía el recorrido por una senda que asciende hasta el páramo del Cueto, que da nombre al recorrido.
El itinerario asciende junto a una joven repoblación, en máxima pendiente, siendo el tramo más exigente del sendero. Sin embargo, a medida que se gana altura se obtienen unas estupendas vistas de Castrojeriz, de las montañas Palentinas y de la imponente silueta de la Peña Amaya.
La subida culmina en un gran páramo, donde el paisaje agrícola se ve roto de vez en cuando por pequeñas repoblaciones de pino negral. En esta zona abierta, el pastizal y las plantas aromáticas completan el escenario. Las vistas desde lo alto del Cueto son espectaculares, llegándose a ver también, en los días claros, las crestas de la Sierra de La Demanda.
El sendero continúa por un amplio camino que supera varios cruces para llegar hasta la carretera que comunica Castrojeriz con Vallunquera. Una vez superada, el camino gira a la izquierda y cruza bajo unos cables de alta tensión. En esta parte del recorrido es muy curioso observar la separación entre las fincas de cultivo ya que los agricultores, al quitar las piedras de sus tierras y echarlas en los linderos, han creado una composición semejantes a las vallas de piedra del norte de la península.
Esta gran cantidad de piedra existente e la tierra, facilitó la construcción de algunas calzadas romanas que atravesaban esta zona como la Vía de Segisamon a Pallantia, que unía la localidad burgalesa de Sasamón con la capital palentina, de la que aún hoy se conservan algunos restos. Estos montones de piedras también son aprovechados por algunas rapaces como posaderos, siendo muy fácil ver mochuelos o cernícalos sobre ellos.
El sendero guía al caminante hasta el final del páramo, momento en el que el camino comienza su vertiginoso descenso a Castrojeriz. A media ladera se encuentra una mesa panorámica, donde se podrá descubrir el nombre de todas las montañas y parajes que se observan.
En pocos metros el recorrido llega de nuevo a la carretera. Se sigue por ella girando hacia la izquierda para rápidamente abandonarla en el primer camino, que se encuentra, tras girar a la derecha y tomar un camino entre tierras de labor y pequeñas huertas, que conduce hasta el lugar de partida, donde se da por terminado este agradable paseo.
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