En el municipio vizcaíno de Dima y en un entorno donde se sitúan numerosas leyendas y lugares de encuentros de brujas (Petralanda, las cuevas de Axlor…) se encuentra la ermita de Santa María Magdalena de Lamindano.
La edificación actual dataría inicialmente del siglo XII pero seguramente fue construida sobre otra prerrománica anterior. Tiene planta rectangular de 23 x 6,2 m. con muros de mampostería vista y fachada principal y esquineros y espadaña en sillería. Ésta tiene tres vanos con sendas campanas y cuatro pináculos laterales rematando una cruz de hierro. Cubierta a dos aguas con pavimento de madera, el pórtico de losas de piedra y canto rodado, está cerrado a los pies y a los lados del evangelio, donde está el carrejo, y de la epístola con un banco adosado al muro.
Posee adosada una vivienda donde, se dice, que estuvo habitada por ermitaños o monjes. A la ermita se accede a través de una escalinata. Posee una imagen de Andra Mari del siglo XV, gótico-renacentista.
De su primitiva construcción románica se conserva una ventana similar a otras del cercano municipio de Zeberio (San Antonio de Barañao, San Adrián de Argiñao). Se trata de un sillar de arenisca cuadrangular de pequeña sdimensiones reutilizado como jamba de una pequeña hornacina que sirve de sagrario. La luz se ha obtenido perforando cuatro vanos triangulares dentro de un círculo, conformando así en el centro una cruz de brazos ensanchados. En el centro de la cruz aparece un pequeño punto inciso y en el interior de los brazos horizontales varias líneas. Todo este esquema se encuentra rodeado por una corona concéntrica a la cual se le adosan cuatro semicírculos también incisos localizados en las esquinas.