Portada » Personajes » Cipriano de Córdoba

Cipriano de Córdoba

por Javier Iglesia Aparicio
0 comentario 58 visitas 11 min. de lectura
A+A-
Reset
Obras de Cipriano de Córdoba en el ms. BN 10029 fols. 137v - 138

[?, p. m. s. IX – f. s. IX] Arcipreste y poeta mozárabe. En latín Cyprianus Cordubensis.

Apenas se conoce nada de su biografía salvo aquello que puede inferirse de su propia obra poética. Ejerció como arcipreste en Córdoba durante la segunda mitad del siglo IX. El principal indicio para datarlo se encuentra en su epitafio de Sansón de Córdoba (Epigrama V), en el que Cipriano ofrece la fecha de su composición: 21 de agosto del año 890.

Parece bien relacionado con la clase alta mozárabe cordobesa pues uno de sus poemas fue compuesto a petición del “conde Adulfo” y al menos tres de sus composiciones hacen referencia a ese grupo social.

Obra de Cipriano de Córdoba

Se conservan siete composiciones poéticas escritas por Cipriano, denominadas Epigrammata, de tres tipos: epitafios, breves poemas destinados a aparecer al principio o al final de copias de la Biblia y en cuyos versos se refería el nombre del donante o del copista; y versos en los que refleja de manera sencilla escenas de la nobleza mozárabe cordobesa, siendo éstas sus obras más originales.

Su obra se ha transmitido en el ms. BN 10029, el códice de Azagra, un volumen misceláneo fechado en el siglo X, en los folios h. 137v-139.

fols. 137v - 138 ms. BN 10029 con los Epigramas de Cipriano de Córdoba
fols. 137v – 138 ms. BN 10029
fols. 138v - 139 ms. BN 10029 con los Epigramas de Cipriano de Córdoba
fols. 138v – 139 ms. BN 10029

Epigrammata de Cyprianus Cordubensis

Presentamos a continuación estas obras en su versión latina y castellana. La versión latina ha sido tomada y adaptada de la edición de J. P. Migne disponible en Epigrammata (Cyprianus Cordubensis) – Wikisource. La traducción al castellano es la de Pedro P. Herrera Roldán publicada en su artículo En torno al mozárabe Cipriano de Córdoba. Excerpta Philologica, 4-5 (1994-5) 215-229

Epigrama I

I. Hoc opus illustri comitis clarescit Adulfi,
Qui sumptis propriis librorum teca novavit;
Qua novi habentur, veteresque in ordine libri
Testamenti veri inhianti ad aethera victum
Pergere mansurum parat, et tollere clamat;
Hoc cibo quis fuerit pastus, haud aggravat exta,
Nec ventrem farcit, sed crebre spiritum alit.
Hinc fons perspicuis paradisi surgit a limphis:
Hic dulcis haustus effluit in pectoris antro,
Hic largos latices per mundi compita mittit
Haec forisque renidet argenti claro metallo,
Et intus cluit spiritalis gratiae dono.
Obtulit nempe Deo praedictus comes Adulfus
Memoriam penes Aciscli martyris almi,
Cordoba sacrata conditus qua sistit in aula.
Vernulus patronus jam fastus testis alumnus,
Ut tantillo tantus dignetur impendere martyr,
Obtineat meritis Christus ut scelera sua
Tergat, atque animam carnali claustra relicta,
Coelicolis glomeret felici in sede beata.
Oblatis bonis fueris dum lector adeptus,
Adsis pro me Deo acclinis posco Adulfus:
Suscipe nunc, nate Fredenande Kare, tuendam
Tecam, quam ipse tuus comptam patravit Adulfus,
Ut legens relegas, et puro pectore serves,
Si illius praeceptis libens consenseris ipse,
Securus ad aulam poteris conscendere coeli.

I Brilla esta obra del ilustre conde Adulfo,
que restauró a su costa la Biblia en la que
por su orden se hallan los libros nuevos y antiguos.
A quien ansía el perdurable alimento del verdadero Testamento,
ir al cielo le prepara y que se lo lleven exclama.
Quien comiera de esta vitualla no agobia sus entrañas,
ni su vientre carga, sino que nutre muchas veces su alma.
Ésta es la fuente que brota de las cristalinas aguas del paraíso,
ésta la que escancia sus dulces sorbos a la cavidad del pecho,
ésta la que envía sus generosos líquidos por los rincones del mundo,
ésta la que reluce por fuera con el brillante metal de la plata
y resuena por dentro con el don de la gracia espiritual.
A Dios la ofreció en verdad el mencionado conde Adulfo
en el templo del venerable mártir Acisclo, que descansa
enterrado en la iglesia que se le ha consagrado en Córdoba
como patrón local, pupilo que ya dio su testimonio,
a fin de que tamaño mártir se digne ocuparse de persona tan humilde:
que por sus méritos logre que Cristo borre sus pecados y junte su alma,
cuando abandone la cárcel de la carne,
con los santos en la feliz y bienaventurada mansión.
Cuando hayas alcanzado, lector, los bienes ofrecidos,
intercede por mí ante Dios: postrado te lo pido yo, Adulfo.
Ahora, Fernando, hijo mío, toma y guarda con cariño
el volumen que tu propio padre Adulfo hizo embellecer,
para que al leerlo lo releas y lo guardes en tu casto pecho.
Si de grado te avienes a sus mandamientos,
tranquilo podrás ascender a la corte del cielo.

Epigrama II

II. Item ejusdem ad petitionem Zoy’ i sui in fidem Bibliothecae, quam scripserat Saturnino archidiacono. Laudum vota tibi Zoylus gratus persolvere nitor Christo Redemptori auctori, et Domino meo: Cujus fultus ope tantum explevi laborem. Dum finem adieris istius thecae legendo, Pro me Deum preceris, lector, intente deposco; Sic valeas Christo post aevum frui securus. Terge luctum moerens, parta virentia vides, Alesque pipant, diverso modulamine voces. Et liquor meri currat in ore temeti.

II. También del mismo a petición de su hijo Zoilo al final de la Biblia que había copiado para el arcediano Saturnino. Agradecido, yo Zoilo, pretendo cumplir con los votos de mis alabanzas a ti, Cristo Redentor, Creador y Señor mío: pues sostenido por tu favor llevé a cabo tamaña labor. Cuando en tu lectura llegues al final de este libro, lector, te pido encarecidamente que ruegues por mí a Dios, así puedas disfrutar tranquilo de Cristo al final de los tiempos. Borra tu afligido pesar, estás viendo los prados verdes y las aves gorjean con trinos de diversos registros; corre también en tu boca el líquido del vino sin mezcla.

Epigrama III

III. Ejusdem Cypriani cujus supra. Renidet in manu flabellum comitis almi, Litteris conscriptum aureis, ut competit illi, Nomine Guifredus ex sacro gurgite dictus. Ut pellat aestum aura suadente flabello, Trade libens comes gloriosae conjugi illud, Simili ut modo incumbentem dissipet aestum Guisindae dictae, et tuo in latere nexae.

III. Del mismo Cipriano que antes. En la mano del venerable conde a quien en la santa pila llamaron con el nombre de Guifredo brilla un abanico bordado con letras de oro, como a él le cuadra, para arrojar el calor, movido por el aire del abanico. Dáselo de grado, glorioso conde, a tu esposa, llamada Guisinda y que está a tu lado, para que de igual manera disipe el agobiante calor.

Epigrama IV

IV. Item alii ejusdem in flabello. Guisindis dextram illustris adorna flabelle, Praebe licet falsos ventos, ut temperet aestum Tempore aestivo defluxa membra refovens. Pansus et officium implens per omnia tuum.

IV. También otros del mismo sobre el abanico. Adorna, abanico, la diestra de la ilustre Guisinda. Ofrécele, aunque sea artificial, aire para que mitigue el calor, reanimando desplegado su sofocado cuerpo en los días de verano y cumpliendo ante todo con tu oficio.

Epigrama V

V. Epitaphium quod isdem in sepulcro domini Samsonis edit metro heroico. Quis quantusve fuit Samson clarissimus abba, Cujus in urna manent hac sacra membra in aula, Personat Hesperia illius famine fota. Flecte Deum precibus, lector, nunc flecte peroro Aethera ut culpis valeat conscendere tersis. Discessit longe notos plenusque dierum. Sextilis namque mensis die vicesima prima. Sextilis namque mensis primo et vicesimo sole. Aera DCCCCXXVIII.

V. Epitafio que el mismo compuso en el sepulcro del señor Sansón en metro heroico. Quién y qué grande fue el ilustrísimo abad Sansón, cuyo santo cuerpo se halla en una urna de esta iglesia, lo proclama Hispania, protegida por su palabra. Conmueve a Dios con tus súplicas, lector, conmuévelo ahora, te lo ruego, para que tras borrar sus culpas pueda ascender a los cielos. Falleció muy conocido y lleno de días el veintiuno de agosto, el día veintiuno del mes de agosto de la era 928 [año 890].

Epigrama VI

VI. Item epitaphium ab eodem editum. Nobilis hic exstat Hermildis in busto locata, Quae Christo famulans temnendo saeculi pompam. Hic jubilans plaudensque heroum conscendit in aulam.

VI. Epitafio compuesto igualmente por el mismo. Aquí yace enterrada en su tumba la noble Hermilde que sirviendo a Cristo y despreciando la pompa del mundo, jubilosa y alegre ascendió desde aquí a la corte de los santos.

Epigrama VII

VII. Epitaphium super tumulum sancti Joannis confessoris. Carceres et diva Joannes ferrea vincla Christi amore tulit: hac functus in aula quiescit.

VII. Igualmente sobre la tumba del santo confesor Juan. Cárceles y funestas cadenas de hierro sufrió Juan por amor a Cristo. Ya muerto descansa en esta iglesia.

Dejar un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.