Portada » Cultura y sociedad » Arte prerrománico » Santa María de Quintanilla de las Viñas

Santa María de Quintanilla de las Viñas

por Javier Iglesia Aparicio
0 comentarios 2,6K visitas 6 min. de lectura
Ermita visigoda de Quintanilla de las Viñas

Enclavada a unos kilómetros de Quintanilla de las Viñas se encuentra la ermita de Santa María, una construcción visigótica del siglo VII. Se trata de los restos de una iglesia de origen visigodo y que el siglo X era parte del monasterio de Santa María de Lara.

Datos históricos sobre Santa María de Lara

El lugar aparece citado por primera vez en un documento del 28 de enero de 929 perteneciente al cartulario de San Pedro de Arlanza, en el que Muniadonna, junto con sus hijos Fernán González y Ramiro González, dona al monasterio femenino de Santa María de Lara (Sancte Marie Virginis, in quorum honore baselica fundata est in suburbio que fuerunt Lara), y a su abadesa doña Acisclo, los terrenos donde se asienta la iglesia y otros bienes como la villa de Mazariegos, en la sierra de Las Mamblas y un molino en Barbadillo del Mercado1.

Su existencia como monasterio independiente no va a ser muy larga. Según un documento del 1 de enero de 1038, Urraca, posiblemente su última abadesa, firma su testamento y dona el monasterio y todas sus posesiones al abad Aureolo de San Pedro y San Pablo de Arlanza. Según este documento los dominios se habían acrecentado durante el algo más de un siglo de existencia, pues además de las posesiones del documento del 929, se habla de huertos y manzanos en Barbadillo (del Mercado), tierras y viñas en Oter de Alios y casas y otras propiedades en Quintanaseca2. La fecha del documento puede estar equivocada pues dice que el 1 de enero era sábado, por lo que en ocasiones se asigna al año 1037.

¿Quién era esta Urraca? Llama la atención que entre los testigos que firman el documento se encuentra el rey Fernando I luego Urraca debía ser de alto linaje. ¿Acaso era Urraca García, hija del conde García Fernández y primera titular del infantado de Covarrubias?

Descripción de Santa María de Quintanilla de las Viñas

El abandono del edificio ha sido patente pues hoy en día solo ha llegado en pie su ábside rectangular y parte del crucero.

La planta original de la iglesia se concibe como la de una basílica monástica de tres naves, caracterizada por un transepto prominente y un ábside rectangular sobresaliente. Posiblemente, contaba con un pórtico de acceso situado a los pies y dos cámaras laterales adosadas al transepto, cuya función precisa permanece desconocida, aunque se ha sugerido que podrían haber servido como celdas monásticas o sacristías.

Plano y alzado de Santa María de Quintanilla de las Viñas

Se estima que las dimensiones originales alcanzaban aproximadamente los 22.7 metros de longitud y 21 metros de anchura, con un transepto que se extendía a lo largo de 20.90 metros. Existe un debate sobre si la planta se configuraba como una cruz latina inscrita en un rectángulo con dependencias laterales o como una basílica compartimentada, con las naves laterales subdivididas en tres salas cada una, que podrían haber estado cubiertas por bóvedas de arista.

La iglesia se construyó con una fábrica de sillería, empleando sillares de gran tamaño, cuidadosamente labrados en piedra caliza y, en menor medida, arenisca. Estos sillares se dispusieron a hueso, es decir, sin el uso de argamasa, Los muros carecen de contrafuertes, y se abren en ellos cuatro pequeñas ventanas alargadas, estrechas y abocinadas, rematadas en su parte superior por un arco de medio punto. Estas ventanas se distribuyen en el ábside y en los muros orientales del transepto.

La cubierta actual es moderna y de madera. Respecto a la cubierta original, se baraja la posibilidad de que contara con bóvedas de piedra: de cañón en la nave central y el transepto, de arista en las naves laterales, y vaída sobre pechinas en el ábside y, quizás, en el crucero. No obstante, la cubierta actual es plana y de madera. En el ábside se conservan los arranques de la bóveda vaída. El acceso al ábside se realiza a través de un arco triunfal de herradura peraltado, un elemento distintivo del arte visigodo.

Decoración de Santa María de las Viñas

La cabecera de la iglesia presenta tres frisos corridos esculpidos, que se extienden a lo largo del ábside y los muros orientales del transepto. Estos frisos se caracterizan por sus bajorrelieves de talla plana y fondo neutro. La iconografía de estos frisos es variada y rica, incluyendo roleos, cintas entrelazadas y sogueadas que forman círculos tangentes, representaciones de animales como leones, leopardos, toros, grifos, pavos reales y diversas aves, así como motivos vegetales como zarcillos de vid, racimos de uvas, palmetas y flores de seis pétalos.

También se identifican elementos epigráficos en forma de monogramas. Los monogramas, cuya interpretación resulta compleja, han sido utilizados para apoyar diferentes teorías sobre la datación de la iglesia.

Relieves Quintanilla de las Viñas
Relieves Quintanilla de las Viñas
Relieves Quintanilla de las Viñas
Relieves Quintanilla de las Viñas
Relieves Quintanilla de las Viñas
Relieves Quintanilla de las Viñas

El interior de la iglesia está presidido por un imponente arco toral de herradura peraltado, cuya decoración reproduce motivos similares a los del exterior, como palmetas, racimos de uvas y aves. Este arco se apoya sobre dos bloques trapezoidales que funcionan como capiteles, adornados con relieves de excepcional calidad. Las columnas de apoyo posiblemente son romanas, al igual que el soporte del altar.

Arco interior de Santa María de las Viñas
Arco interior de Santa María de las Viñas

En ellos se representan ángeles que sostienen medallones con las figuras del Sol, acompañado de la inscripción “SOL”, y la Luna, con la inscripción “LUNA”. En el capitel sur se encuentra una inscripción que reza: “†OC EXIGVVM EXIGVA OFF(ert) D(e)O FLAMMOLA VOTUM”, cuya traducción sería “La humilde Flámula ofrece este modesto voto a Dios”.

Relieve con la inscripción †OC EXIGVVM EXIGVA OFF(ert) D(e)O FLAMMOLA VOTUM
Relieve del Sol con la inscripción †OC EXIGVVM EXIGVA OFF(ert) D(e)O FLAMMOLA VOTUM

La inscripción de Flámola sigue siendo la pieza más directa de posible evidencia de datación, pero la ambigüedad en torno a la identidad de Flámola (noble visigoda o esposa del conde Gonzalo Téllez) es central en el debate.

Relieve de la Luna
Relieve de la Luna

Otros dos bloques, de la misma forma y tamaño que los anteriores, se encuentran actualmente en el suelo del altar mayor. Uno representa una figura masculina de frente, llevando en la mano derecha una cruz procesional y dos ángeles iguales que en los anteriores bloques del Sol y la Luna.

El otro, sigue la misma disposición, solamente que en este caso la figura es femenina, representa una mujer con la mano cruzada sobre el pecho. Parece posible que estuvieran situados en el arco de separación entre el crucero y la nave central, que sería semejante al que se conserva en la cabecera.

Otros dos bloques pueden representar a evangelistas. En 2004 estos dos relieves fueron robados aunque, felizmente, fueron encontrados en 2019.

El último bloque situado por encima de la clave del arco triunfal, representa a Cristo barbado con nimbo crucífero en actitud de bendición. Se especula que los evangelistas estuvieran a ambos lados de este último relieve.

  1. Zabalza, Manuel: Colección diplomática de los condes de Castilla, Junta de Castilla y León, 1998, pág. 230 ↩︎
  2. Serrano, L: Cartulario de San Pedro de Arlanza, doc. 30 ↩︎