[? – † 927] Conde de Cerdaña (897 – 927) y de Besalú (920 – 927)
Hijo de Wifredo I el Velloso y de Guiniguilda de Ampurias.
Tras la muerte de su padre se ocupó del gobierno del condado de Cerdaña mientras sus hermanos Wifredo II Borrell y Suniario gobernaban en Barcelona, Gerona y Osona, y Sunifredo II dominaba el condado de Urgel. A la muerte de su tío Radulfo de Besalú en el 920 heredó también este condado tras llegar a un acuerdo con su hermano el conde Suniario de Barcelona. Además también recibió el Ripollés.
El hecho más reseñable de su gobierno es la labor de repoblación que realizó en el pagus de Berga, incorporado por su padre al condado de Cerdaña. Mandó construir las iglesias de Sant Pau de Caserres (consagrada el 20 de enero de 907) y Santa María d´Aviá. En el 921 presidió un juicio junto con el obispo Guiu de Gerona (907-936).
Miró II falleció el año 927 y fue sucedido por su hijo Sunifredo II.
Matrimonio y descendencia
Miró II se casó con Ava de Cerdaña y tuvo la siguiente descendencia:
- Sunifredo II de Cerdaña (915-968), conde de Cerdaña y Besalú.
- Wifredo II de Besalú (¿? – 957), conde de Besalú.
- Mirón III Bonfill de Cerdaña (920-984), conde de Cerdaña y Besalú.
- Oliba Cabreta (920-990), conde de Cerdaña y Besalú
- Quixilona
- Guilinda
- Sesenanda
De una relación con Virginia de Ampurias, hija del conde Delà de Ampurias tuvo otra hija: Gontruda de Cerdaña, esposa del conde Lope I de Pallars.